Mulegé: desierto, mar, ríos… un oásis
Para llegar a Mulegé, debes recorrer 238 km desde La Paz, lo que agradecerás, pues de principio a fin es espectáculo natural no tiene igual, dado el contraste que se da entre el mar ye desierto. Una vez que arribes te preguntarás ¿por dónde empezar? Elige uno de los atractivos de San Ignacio, que encierra atractivos con gran historia como la Misión de San Ignacio de Loyola hecha de piedra volcánica y con un maravilloso altar estilo barroco.
También si te gusta explorar, visita las pinturas rupestres de San Borjita, que se suponen son las más antiguas del continente, pues cuentan con 7,500 años de antigüedad.
En la Reserva de la Biosfera El Vizcaino, te espera también la Laguna de San Ignacio el santuario de la ballena gris, en donde puedes practicar buceo, kayak y surf; o pasear en cuatrimoto para observar la flora y fauna.
También pertenece a esa zona Guerrero Negro exuberante por su desierto, las dunas de sal y un complejo lagunar, con tres principales lagunas como la de Guerrero Negro, Manuela y Ojo de Liebre, la última conocida gracias a que en ella arriban especies como la ballena, el pelícano blanco, el águila pescadora y la garza blanca.
Esa área de 2 millones y medio de hectáreas habitan 500 especies de flora terrestre y acuática; así como 300 especies de animales, entre los que destacan el berrendo peninsular, el borrego cimarrón y el águila real. Además hay 16 islas e islotes; áreas geomorfológicas como planicies, costeras y sierra.
Al visitar Mulegé conocerás grandes ecosistemas y paisajes sin recorrer grandes distancias.