Hoteles con un ADN muy singular
Un hotel similar a un rascacielos, otros con miles de habitaciones, uno con trece siglos de antigüedad, y dos «inmensamente pequeños», forman parte del reducido club de establecimientos singulares que tienen algo especial y único.
Los lugares donde nos alojamos y disfrutamos son uno de los contenidos más compartidos a través de las redes sociales y, en algunos casos, pueden igualar o eclipsar a otras experiencias que vivimos en nuestros viajes, debido a su singularidad.
Hay algunos hoteles donde el viajero puede vivir estancias muy especiales y que asombran a sus amigos y familiares cuando los descubren en sus páginas de redes sociales, según Enrique Sancho, representante de Hotelscan.com en España.
«Aunque es recomendable que quienes comparten su experiencia en línea mediante fotos o vídeos tomen imágenes amplias y centradas en la arquitectura o decoración del hotel, dejando a un lado los clientes para respetar su privacidad y tranquilidad», sugiere a Efe.
Estos son algunos de los hoteles más singulares del mundo elegidos por la plataforma de búsqueda de hoteles y apartamentos Hotelscan, lugares cuya demanda “es más alta que la media, porque a muchas personas les gusta disfrutar de un hotel de récord o excepcional, aunque tengan que pagar un precio mayor o reservar con muchos meses de antelación», según Sancho.
Experiencia única en las alturas
El Gevora Hotel (http://gevorahotels.com) en Dubai (Emiratos Árabes Unidos) ocupa el puesto número uno entre los hoteles más altos, al medir 356 metros, según Sancho.
Añade que el Gevora tiene 528 habitaciones, la mayoría de lujo, teniendo la más pequeña 46 metros cuadrados (m2) y la más grande 85 m2, y que cada planta cuenta con un mayordomo dispuesto a satisfacer todas las necesidades de los huéspedes.
«Este impresionante hotel de color dorado cuenta con cinco restaurantes que ofrecen una gran variedad de ambientes y cocinas, y también tiene spa, dos gimnasios, uno para hombres y otro para mujeres y una piscina cubierta», explica.
«El lujo comienza al entrar por una de las puertas giratorias del lobby, revestidas de oro macizo y continúa al montarse en uno de los ocho ascensores que tardan 38 segundos en subir los 75 pisos hasta llegar a la espectacular piscina de la azotea, donde se puede disfrutar de las mejores vistas de la ciudad tomando un cóctel o dándose un baño», según el representante de Hotelscan.
Miles de habitaciones en un solo complejo
«El hotel más grande es el MGM Grand (www.mgmgrand.com) en Las Vegas (EEUU), con casi 7.000 estancias. Su edificio principal tiene 4.293 habitaciones y 751 suites, a lo que hay que añadir las tres torres The Signature, con 576 suites cada una de ellas, los 51 lofts del Skylofts y las 29 villas de The Mansion at MGM Grand», según Sancho.
El experto indica que este hotel alberga el famoso pabellón de conciertos y deportes MGM Grand Garden Arena, y restaurantes galardonados, como el de Joel Robuchon, especializado en alta cocina francesa; el asador Tom Colicchio’s Craftsteak; y el Morimoto Las Vegas, que prepara cocina japonesa creativa.
“¡Y el entretenimiento viene de la mano del Cirque du Soleil con su espectáculo KÀ, una producción que incluye acróbatas, artes marciales, marionetas y pirotecnia!”, destaca Sancho.
Disfrutar a lo grande en espacios diminutos
Según este especialista en turismo es complicado decir cuál es el hotel más pequeño. “Podría ser el Hotel Central & Café (www.centralhotelogcafe.dk) de Copenhague (Dinamarca), con una sola habitación de 12 metros cuadrados con todo tipo de detalles y comodidades, situada encima de la cafetería Granola Café en el barrio de Vesterbro”, apunta.
“Con la reserva está incluido el desayuno, que se puede degustar bajando las escaleras o en la habitación”, añade.
«Otro establecimiento extremadamente pequeño está situado en Alemania, en Amberg, en la región de Baviera. Es el hotel Eh’häusl (http://ehehaeusl.de) con una superficie útil total de 53 m2 y una sola habitación cuyo precio es de unos 280 dólares la noche (con desayuno incluido). Tiene televisor de pantalla plana, hilo musical, un sofá, una chimenea, una bañera de hidromasaje… y, por supuesto, cama”, según Sancho.
No obstante, Hotelscan considera el “hotel” más pequeño a un popular Volkswagen Escarabajo blanco situado en Jordania, concretamente en Al Jaya, al sur de la capital, Amán.
“Este singular alojamiento está habilitado para dos personas. Su propietario ofrece desayunos y comidas típicas jordanas en una cueva cercana que acondicionó para tenerla como recepción. La noche cuesta unos 55 dólares”, señala Sancho.
Un hotel de mil, 300 años
El hotel más antiguo del mundo es el Nishiyama Onsen Keiunkan, o Koshu Nishiyama Hot Spring-Keiunkan, situado Yamanashi cerca del Monte Fuji, en Japón, ha sido regentado por 52 generaciones de una misma familia y fue abierto en el año 705, según Hotelscan.
“Este alojamiento (www.keiunkan.co.jp/en) cuenta con 37 habitaciones decoradas al estilo tradicional japonés, que cuestan entre 435 y 649 dólares la noche y, en 1997, fue renovado manteniendo su estética tradicional”, explica Sancho.
«Este lugar con más de 1.300 años de historia, es especialmente popular por los beneficios de sus aguas termales que atrajeron a los guerreros samuráis en épocas de guerra para curar sus heridas y sus problemas musculares», concluye.
Por Ricardo Segura.
EFE/REPORTAJES