Los mejores motivos para invertir, según Israel Silva.
Si no sabes si invertir o ahorrar, te ayudamos a tomar la decisión con cuatro sencillos motivos
Llamamos inversión a la actividad por la cual una persona física, una empresa o una institución destina sus ahorros o dividendos a otra actividad que le permita generar ganancias con el paso del tiempo y que tiene el objetivo de evitar la pérdida o derroche de dicho capital.
La inversión es un movimiento económico muy interesante a la vez que sencillo. Si somos capaces de ahorrar una cantidad de dinero al mes y destinarla a la inversión, con el paso del tiempo veremos cómo ha aumentado nuestro capital sin ningún esfuerzo extra del propio esfuerzo de ahorrar.
Pero invertir es una decisión seria que debe ser fruto de un proceso de meditación ya que al igual que puede generar ganancias, si el dinero está mal invertido también puede generar pérdidas, por lo que antes de realizar una inversión es importante hacer un estudio del mercado donde queremos destinar nuestros fondos y ser conscientes de qué riesgos puede correr nuestro dinero.
En muchas ocasiones, el miedo a la inversión lleva a guardar los ahorros en cuentas o depósitos. Es una opción segura pero con rendimiento nulo, es decir, no existe la opción de perder ese dinero pero tampoco de ganar más con él. Además, en cuanto a los depósitos de ahorros hay que tener en cuenta la inflación, es decir, la pérdida de valor que puede sufrir el dinero con el paso del tiempo.
INVERSIÓN, SOLUCIÓN DE FUTURO
Invertir tu dinero lo puedes tomar desde el punto de vista de crear un colchón económico para posibles emergencias en el futuro. Mientras tu dinero invertido crece puedes tener la tranquilidad de poder utilizarlo en algún momento necesario, como un gasto inesperado o la pérdida del trabajo.
CUANTO MÁS TIEMPO, MEJOR
Invertir supone alcanzar una meta a largo plazo. La inflación con el paso del tiempo puede tener resultados devastadores, ya que posiblemente en el futuro cualquier tipo de bien se encarecerá. Un ejemplo es la compra de inmuebles: el precio de una vivienda hace 20 años era mucho menor al precio al precio de la vivienda a día de hoy. Si compraste una casa hace 20 años, invertiste menos dinero de lo que vale ahora.
DINERO TRABAJANDO
La inversión en un comodín para aumentar nuestro dinero y nuestro patrimonio con el paso del tiempo. Antes de invertir un dinero debemos tener claro los riesgos que posiblemente debamos asumir. Una cuestión importante a tener en cuenta es el plazo, es decir, el tiempo que tenemos para que nuestra inversión pueda dar resultados.
INVERTIR, NO AHORRAR
Conseguir reunir una cantidad importante de dinero ya supone un logro, pero el desconocimiento sobre cómo utilizarla puede desembocar en el derroche y la pérdida de este. Por lo tanto, siempre es mejor invertir de ahorrar. Invirtiendo generarás más dinero del que tenías en el principio. El interés se empieza a generar en el mismo momento de la inversión, a su vez, el propio interés de la inversión generará más intereses. EL dinero ahorrado es dinero estancado que además corre el riesgo de perder valor.
Llamamos inversión a la actividad por la cual una persona física, una empresa o una institución destina sus ahorros o dividendos a otra actividad que le permita generar ganancias con el paso del tiempo y que tiene el objetivo de evitar la pérdida o derroche de dicho capital.
La inversión es un movimiento económico muy interesante a la vez que sencillo. Si somos capaces de ahorrar una cantidad de dinero al mes y destinarla a la inversión, con el paso del tiempo veremos cómo ha aumentado nuestro capital sin ningún esfuerzo extra del propio esfuerzo de ahorrar.
Pero invertir es una decisión seria que debe ser fruto de un proceso de meditación ya que al igual que puede generar ganancias, si el dinero está mal invertido también puede generar pérdidas, por lo que antes de realizar una inversión es importante hacer un estudio del mercado donde queremos destinar nuestros fondos y ser conscientes de qué riesgos puede correr nuestro dinero.
En muchas ocasiones, el miedo a la inversión lleva a guardar los ahorros en cuentas o depósitos. Es una opción segura pero con rendimiento nulo, es decir, no existe la opción de perder ese dinero pero tampoco de ganar más con él. Además, en cuanto a los depósitos de ahorros hay que tener en cuenta la inflación, es decir, la pérdida de valor que puede sufrir el dinero con el paso del tiempo.
FACEBOOOK: @ISRAELSILVAMX
NSTAGRAM: @ISRAELSILVAMX