Falta de sonrisa y tropiezos , síntomas de malformación Arnold Chairi
Este problema de salud puede aparecer de manera espontánea en menos de 5 por cada 10 mil bebés recién nacidos.
Si un niño no se ríe, tropieza con frecuencia y se queja de dolores de cabeza podría padecer de una malformación de Arnold Chiari, una afección casi siempre congénita de las estructuras del cráneo y el cerebelo, indicó el investigador Patricio Barros Núñez.
El coordinador académico del Centro de Investigación Biomédica de Occidente (CIBO) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, explicó en un comunicado que este problema de salud puede aparecer de manera espontánea en menos de 5 por cada 10 mil recién nacidos.
El experto en genética señaló que existen cuatro formas de esta enfermedad, en función de su gravedad.
«No se trata de ser alarmistas pero sí de observar a nuestros niños y ver si ‘han perdido la sonrisa'», aseveró.
Síntomas de la enfermedad
Los niños con este padecimiento se muestran más bien serios porque en realidad les duele realizar cualquier tipo de gesticulación, toser, o incluso en los bebés, podrían no alimentarse bien porque sufren molestias mientras succionan.
«En etapas más avanzadas podemos observar que el menor tiene problemas de coordinación y que no puede tomar una cuchara adecuadamente para llevársela a la boca», dijo Barros Núñez.
Aunque los anteriores son síntomas que podrían asociarse a un sinfín de patologías, es importante referirlos al médico para que, de ser necesario, realice estudios de imagenología en donde se podría evidenciar una malformación de Arnold Chiari.
Malformaciones evidentes
El especialista explicó que en los pacientes que presentan esta malformación, el cerebelo o algunas estructuras del tronco cerebral se introducen en el foramen magno, la porción superior de la columna vertebral que comunica con la médula espinal.
«Parte del tejido cerebral se extiende al canal medular en donde queda atrapado, como sucede con una hernia», detalló.
Finalmente, dijo que en los casos menos graves, el paciente puede no tener ninguna molestia. En los más graves, se presentan malformaciones evidentes y se requiere atención quirúrgica.
EFE/SALUD/MEX