Una pareja se desnuda frente a cuadros de Adán y Eva
Este acto ya se había reportado en el Museo del Prado hace dos años, pero los protagonistas fueron sorprendidos por los guardias y evitaron el desnudo total, aunque esta vez sí lo lograron Adrián Pino y Jet Brühl.
Una pareja se desnudó esta mañana por sorpresa en la sala del Prado donde se exhiben los cuadros de «Adán» y «Eva» de Alberto Durero, tras lo que han sido conducidos por los servicios de seguridad de la pinacoteca ante la Policía Nacional, han informado a EFE fuentes del museo.
La «performance» se ha registrado sobre las once de la mañana, cuando Adrián Pino y Jet Brühl, según ellos mismos informan en sus cuentas de las redes sociales, se han despojado de la ropa que llevaban, se han quedado desnudos, y varios visitantes les han fotografiado, unas imágenes que luego ellos han subido.
Fuentes del museo han confirmado a EFE el incidente, una acción, han dicho, que ya intentaron hace dos años, aunque entonces «no les dio tiempo a desnudarse completamente».
No había menores en la sala
«Nos preocupa que moleste a los demás o que puedan sentirse ofendidos, pero poco más podemos hacer», han añadido las mismas fuentes del museo, que impide, por ejemplo, que los visitantes entren descalzos o con comida.
Los protagonistas, que se desnudaron cuando no había ningún menor en la sala, fueron identificados por la Policía Nacional, y su acción podría acarrearles una sanción administrativa.
La pareja explica en un vídeo que ha colgado el portal Código Nuevo que lo han hecho para destruir «toda una serie de ideas y constructos sociales» que consideran ridículos y han elegido los cuadros de «Adán» y «Eva», de Durero, porque «es la institución de la idea de género».
Estaban aburridos y querían pasarla bien
«Nos colocamos desnudos con la particularidad de que me muestro como una mujer, con los genitales ocultos», explica él, a lo que ella precisa que es «biológicamente una mujer», pero no lo es «realmente».
En definitiva, añaden, querían pasárselo bien y divertirse, porque la sociedad les parece «una parida» y «se aburrían».
EFE/ARTE Y CULTURA